Según creacionistas como Hugh Ross, que sostienen la idea de una tierra de gran antigüedad, el Salmo 104:6-9 se refiere a la semana de la creación, pero un análisis más de cerca demuestra otra cosa.
Hugh Ross y otros creacionistas de la tierra antigua insisten en que el Salmo 104 relata la creación y que, por lo tanto, debe ser útil en ayudarnos a entender Génesis 1.1 En particular, ya que el salmo menciona la muerte de animales (Salmo 104:29) y la naturaleza carnívora de algunos de ellos (Salmo 104:21), estos autores argumentan que existían tanto la muerte como el comportamiento carnívoro de animales en la creación de Dios que era muy buena (Génesis 1:31) antes de que pecara Adán.2
La mayoría del salmo se trata de la creación como la percibe el salmista en la época en que él vive y escribe.
No estamos de acuerdo de que sea un relato de la creación como lo es Génesis 1. Dos versículos en el salmo (Salmo 103:5, 19) se refieren a los eventos de Génesis 1, pero la mayoría del salmo habla de la creación como la percibe el salmista durante la época en que él vive y escribe. Es evidente de la manera en que lo describe (en particular en los verbos del tiempo presente). El salmo también hace mención de Líbano (Salmo 104:16), barcos (Salmo 104:26), y pecadores e impíos (Salmo 104:35), y ninguno de ellos existía durante la semana de la creación.
Otro motivo para rechazar la afirmación que el Salmo 104 sea narrativa de la creación es que, al contrario de lo que creen muchos proponentes de la tierra antigua, el Salmo 104:6–9 se refiere claramente al diluvio de Noé y no al tercer día de la semana de la creación. Esto se nota en la alusión en el versículo 9 al arcoíris de la promesa mencionada en Génesis 9:11 y en Isaías 54:9. Dios no hizo tal promesa al final del día 3 de la semana de la creación. Si la hubiera hecho en Génesis 1, entonces el diluvio global en los días de Noé habría representado la ruptura de esa promesa.3
Como comentario sobre el diluvio de Noé, Salmo 104:6–9 arroja mucha luz sobre los efectos geológicos del diluvio, pero sobre este asunto algunas de las traducciones inglesas de la Biblia dan una impresión errónea.
En particular, las traducciones del Salmo 104:8 en las versiones KJV, NIV, NKJV y NRSV no son precisas. Con respecto a las aguas, las tres últimas traducciones dicen algo semejante a lo que dice la KJV, que declara, “They go up by the mountains; they go down by the valleys unto the place which thou hast founded for them.” Aquí los traductores toman they y them como referentes a las aguas mencionadas en el versículo 6. Aunque esto es posible gramáticamente, entender así el hebreo presenta varios problemas.
Primero, traducirlas así no tiene sentido en el contexto del pasaje. El versículo 7 dice que las aguas se huyeron ante la reprensión del Señor—después de haber cubierto por completo las montañas de la tierra (versículo 6). Si las aguas se huyen de haber cubierto las montañas, entonces no van a correr cuesta arriba por encima de las montañas.
Segundo, they y by (u over, como en traducciones semejantes) no se reflejan expresamente en el texto hebreo (que sigue igual independientemente de las traducciones). Delante de mountains y valleys no hay preposiciones en hebreo. El pronombre they se refleja en las desinencias de los verbos hebreos, los cuales están en la forma de la tercera persona plural. Así que los verbos en sí no identifican sus sujetos. Pero they en el versículo 8 se refiere claramente a them al final del versículo. Los sustantivos más probables relacionados al pronombre them son los sustantivos antecedentes más cercanos a them, los cuales no son las aguas del versículo 6, sino las montañas y valles del versículo 8.
Tercero, aunque se podría suponer que la Septuaginta (LXX) apoyara las traducciones ya mencionadas, eso no es el caso. Entre otras cosas, la LXX traduce todos los verbos en los versículos 6–8 en el tiempo futuro, a diferencia de cada una de las traducciones inglesas mencionadas arriba y a continuación. Además, en el versículo 8, la forma gramatical de los sustantivos griegos traducidos mountains y valleys se podría entender como nominativa o acusativa. En otras palabras, no es posible determinar definitivamente, basándose sólo en la forma gramatical de los sustantivos y sus verbos relacionados, que los sustantivos funcionen como sujetos o complementos de los verbos del versículo. Sólo el contexto nos lo puede indicar, y la versión LXX de este pasaje simplemente no es clara y debe rechazarse como inexacta.
Por estas razones hemos concluido que las versiones ESV, HCSB y NLT traducen correctamente el Salmo 104:8—y lo hacen en forma similar a la NAS, que declara, “The mountains rose, the valleys sank down to the place which You established for them.” En otras palabras, el sujeto de los verbos no son las aguas mencionadas en versículo 6. Cada uno de los dos verbos al principio de versículo 8 tiene su propio sujeto: the mountains y the valleys, respectivamente. Por lo tanto, el versículo 8 se refiere a movimientos tectónicos en la corteza terrestre durante la etapa en la que las aguas del diluvio retrocedieron, y no se refiere a ningún evento del día 3 de la semana de la creación.