A una de nuestras lectoras le preocupa un tema que ha sembrado la duda en la fe de su esposo, y se pregunta cómo responderle. Tim Chaffey, de Respuestas en Génesis en Estados Unidos, aborda sus inquietudes.
Mi esposo tuvo hace poco una discusión con uno de sus profesores en relación a unos textos en hebreo de Génesis y ha llegado a la conclusión que, como parece que existe [una contradicción] en el orden de la creación entre los capítulos 1 y 2 de Génesis, la Biblia no es infalible. No estoy de acuerdo con esta conclusión, y me gustaría saber cómo responderle. Los pasajes en cuestión son Génesis 1:1–2:3 y Génesis 2:4–22. Ha dicho ser creyente durante 10 años, pero ahora cree que el ser humano ha echado a perder la Palabra de Dios, y que la Biblia no es totalmente perfecta y tiene errores. ¿Me podrían ayudar?
–R. H., EE.UU. de A.
Gracias por ponerte en contacto con Respuestas en Génesis.
Mi esposo tuvo hace poco una discusión con uno de sus profesores en relación a unos textos en hebreo de Génesis y ha llegado a la conclusión que, como parece que existe [una contradicción] en el orden de la creación entre los capítulos 1 y 2 de Génesis, la Biblia no es infalible. No estoy de acuerdo con esta conclusión, y me gustaría saber cómo responderle. Los pasajes en cuestión son Génesis 1:1–2:3 y Génesis 2:4–22.
Éste es un argumento que se emplea a menudo en contra de una interpretación tradicional del libro de Génesis (es decir, que Dios creó todo en seis días literales hace unos 6.000 años). Este argumento pretende demostrar que hay inconsistencias entre los dos primeros capítulos de la Biblia, así que críticos y escépticos lo utilizan con la intención de probar que no se puede confiar en la Biblia; algunos cristianos que creen en miles de millones de años lo utilizan para tratar de demostrar que estos capítulos no deberían entenderse en un sentido literal. Sin embargo, este argumento se basa en una interpretación incorrecta de Génesis 2.
Génesis 1:1–2:3 nos ofrece un relato cronológico de lo que hizo Dios en cada uno de los siete días de la creación. Génesis 2:4–25 se enfoca en el sexto día y narra algunos de los acontecimientos de ese día.1 Vamos a fijarnos en lo que ocurrió en el sexto día según Génesis 2, para comprobar que no se encuentra allí discrepancia alguna:
El tema en cuestión que la gente tiene con Génesis 2 es que el orden de la creación del hombre, de los animales y de los árboles parece ser contrario al orden establecido en Génesis 1.
Génesis 2:7 describe la creación del hombre:
Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
Después de la creación del hombre, Génesis 2:9 menciona que Dios creó los árboles, incluyendo el árbol de vida y el árbol de la ciencia del bien y del mal.
Y Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista, y bueno para comer; también el árbol de vida en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal.
Entonces, Génesis 2:19 menciona la creación de ciertos animales terrestres:
Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
A primera vista esto parece ser una contradicción, porque Génesis 1 indica que los animales y los árboles fueron creados antes de la creación del hombre. Sin embargo, ambos problemas se pueden resolver al entender la lengua original y el proceso de traducción: la palabra para “formó” en ambos pasajes es “yatsar” en hebreo. La Biblia de Reina-Valera de 1960 (en las citas anteriores) emplea el pretérito perfecto para la traducción de este verbo. No obstante, este término hebreo también puede traducirse con el pretérito pluscuamperfecto o antecopretérito. En este caso, se leería como que Dios “había formado” a estas criaturas.2 Algunas traducciones modernas lo tienen así, por ejemplo, la Nueva Versión Internacional al inglés (NIV, por sus siglas en inglés).3 Si empleáramos el pluscuamperfecto en español, Génesis 2:19 se leería:
Jehová Dios había formado, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
Esta traducción descarta cualquier problema con la cronología, porque se refiere a lo que Dios ya había hecho durante la creación en días anteriores. Así, las plantas (Génesis 2:9) y los animales (Génesis 2:19) ya habían sido formados por Dios durante los primeros días de la creación.4
Él ha dicho ser creyente durante 10 años, pero ahora cree que el ser humano ha echado a perder la Palabra de Dios, y que la Biblia no es totalmente perfecta y tiene errores. ¿Me podrían ayudar?
Parece que esto se debe a una mala interpretación de la doctrina de la infalibilidad de la Biblia, que se encuentra claramente explicada en nuestra declaración de fe.
Los 66 libros de la Biblia son la Palabra escrita de Dios. La Biblia, divinamente inspirada por Dios, es infalible en su totalidad. Sus declaraciones son empíricamente ciertas en todos los manuscritos originales. Es la autoridad suprema en todo lo que enseña. Su autoridad no se limita a asuntos espirituales, religiosos o sobre la redención, sino que abarca las declaraciones en campos como la historia y la ciencia. (El énfasis es nuestro).
Es importante notar que la infalibilidad sólo se aplica a los manuscritos originales, y que no se extiende a cada copia y a cada traducción. Como consecuencia de esta interpretación incorrecta, a veces alguno se ha encontrado con un error en una de las traducciones y ha asumido equivocadamente que la Biblia debe contener errores. En realidad, el error fue cometido por un comité de traducción o por el escriba responsable de copiar el manuscrito.
Puedo recomendarte un libro en inglés titulado Nothing But the Truth (Nada más que la verdad) por Brian Edwards, en el que se explican los asuntos sobre la traducción y la infalibilidad en detalle, y donde se tratan las cuestiones que se está planteando tu esposo (v. también “¿Por qué 66?”).
Asumir de forma automática que se trata de una contradicción deja al autor del libro de Génesis bastante malparado. ¿Era tan inepto que no pudo evitar contradecirse a sí mismo en los dos primeros capítulos? ¿O se escribieron estos dos capítulos con dos enfoques diferentes? En lugar de asumir apresuradamente que el escritor no pudo mantener la coherencia en los dos primeros capítulos, hay que profundizar un poco más (como has hecho al pedirnos ayuda) para ver si hay una explicación mejor.
Aunque el hombre y el diablo a menudo intentan echar a perder la Palabra de Dios, podemos tener confianza en que la Palabra de Dios es verdadera y perfecta desde el mero principio.
En Jesucristo,
Tim Chaffey, Respuestas en Génesis, EE.UU. de A.