Originally published in Creation 6, no 4 (May 1984): 26-27.
Seamos honestos. En la historia de la ropa nueva del rey, fue un niño el que reconoció que el rey no tenía ropa puesta. Aún si los padres de familia no tienen la valentía para reconocerlo, los niños reconocen rápidamente que la evolución contradice la Biblia y socava la fe Cristiana.
¿Cómo pueden los padres animar a sus hijos a compartir la fe y mantener su confianza en la Biblia? Les sugiero las siguientes actividades:
-Enseñe a sus hijos sobre la Creación desde pequeños. Lean la narración Bíblica una y otra vez hasta que lo tengan memorizado. Léales acerca de las criaturas maravillosas de Dios en libros ilustrados, pero asegúrese que no tengan enseñanzas anti-Bíblicas como la evolución teísta, creación progresiva, teoría de la brecha, entre otras. Evite los libros que se dicen ser Cristianos pero que empiezan con el mundo como una bola derretida, o que incluyen ‘millones de años’.
-Infunda en sus hijos un sentido de maravilla hacia la grandeza y magnificencia de lo que Dios ha hecho (recordando que el mundo que vemos el día de hoy ha sido afectado por la Maldición). Cuando salga al campo, o aún en el jardín, muéstreles las maravillas que pueden ser observadas. Enséñeles lo que Génesis habla acerca de las aves, los murciélagos, los insectos voladores, y constantemente recuérdeles que Dios hizo que las aves vuelen el 5º día. Sáquelos en la noche y muéstreles la luna que Dios hizo en el cuarto día. Muéstreles los patrones detallados en las hojas y recuérdeles una y otra vez qué tan absurdo es sugerir que tales patrones tan bellos sucedieran accidentalmente.
-Enséñele a su hijo las falacias de la evolución antes de que se los enseñen en la escuela. Asegúrese como padre, saber los errores en la teoría evolucionista. Para hacer esto, necesita esforzarse y estudiar muy bien libros sobre el tema. Después se tendrá que esforzar enseñándoles estos hechos a lo largo de su educación en su hogar.
-Como los dinosaurios se utilizan comúnmente, aún en preescolar, para introducir a los niños a la evolución, recuérdeles que los dinosaurios terrestres fueron hechos el 6º día de la Creación (y otras criaturas dinosaurescas como el Pleisosaurio, en el 5º Día). Infórmeles de las evidencias sobre los dinosaurios que vivieron con las personas, sobre los tallados en piedra encontrados, y de las leyendas de los dragones. Siempre esté listo para señalar cuando un comentador está hablando de evolución. Anímelos a entristecerse por el hecho que tanta gente cree lo que no es verdad y substituyen el azar por los maravillosos regalos de Dios.
-Anime a sus hijos a estudiar la evidencia real por ellos mismos. Llévelos a lugares donde puedan encontrar fósiles y explique como los fósiles usualmente son formados al ser sepultados rápidamente en sedimento. Explíqueles cómo el Diluvio en Génesis proveyó las condiciones perfectas para la formación de millones de fósiles alrededor de toda la Tierra. Señale que los fósiles en las rocas sedimentarias no muestran que las rocas formadas lentamente ni que la Tierra sea antigua. Al contrario, indican procesos rápidos y por lo mismo una catástrofe reciente por agua como lo enseña en la Biblia. Mencióneles que los animales que mueren hoy probablemente no se formen en fósiles, ya que esto no sucede diariamente.
-Finalmente, explíqueles en detalle por qué hay
sufrimiento y crueldad en el mundo. Dígales de dónde
viene la muerte y su significado. Presénteles cómo
Dios formó un mundo perfecto pero que el pecado de Adán
echó a perder esa perfección y trajo muerte y
descomposición a la Tierra. Dígales que Adán
fue castigado con la maldición de muerte, ya que Dios
de la Creación sabía que Él mismo vendría
en la forma de Jesucristo, el postrer Adán, para sufrir
la misma maldición de la muerte Él mismo. Entonces,
todos los que acepten el sacrificio del pecado tendrán
perdón y podrán tener la esperanza de la vida
eterna. Explique que para su muerte y resurrección, Jesús
restauró una relación con Dios que estaba rota,
y que al final de los tiempos, Dios crearía un cielo
nuevo y una Tierra nueva—una creación completamente
restaurada en la que todos los que realmente le amen podrán
compartir.